Hoy toca historia truculentosa, de esas que me gustan a mi y a mi lado más macabro.
Según la historia recurrente, el cuerpo de la joven fue sacado del río Sena en el Quai du Louvre en París a finales de la década de 1880. El cuerpo no mostraba signos de violencia y se sospechaba que se trataba de un suicidio.
Un patólogo en la morgue de París quedó tan impresionado por su belleza que moldeó una máscara mortuoria de su cara. Como los franceses son así de raritos enseguida produjeron numerosas copias que se convirtieron rápidamente en un accesorio de moda (?¿)
Albert Camus entre otros compararon su enigmática sonrisa a la de Mona Lisa, dando lugar a numerosas especulaciones como qué pistas podía ofrecer su expresión extrañamente feliz en su cara sobre su vida, muerte y su lugar en la sociedad.
YUYUUUUUUU!!!
Uhmmm pues esta historia me ha gustado mucho mucho... que curioso, mirala que flipi está... eso es alguna droga tipo santa teresa y sus extasis...
ResponderEliminarWow!!!
ResponderEliminarMudita y sin palabras acabas de dejarme.
Un tio que se queda encandilado con la cara de una muerta...toma ain.
Uy si, curiosa y macabrofetichista!!
ResponderEliminarLa gente es muy macabra, muy macabra!
ResponderEliminarQue mal rollo no?? el otro hciendo máscaras de una muerta, ufff que tío, me da miedo el tio ese.
ResponderEliminarBsos