Lo de hoy no es un cementerio, pero sin duda se le parece. Este parque australiano tiene ese aire entre gótico y siniestro de los geniales cementerios londinenses, pero no, no lo es....
Sin duda un jardín entre jardines, en el que el escultor autodidacta William Ricketts se dedicó a realizar sus obras inspiradas en la cultura aborigen (el era descendiente porparte de madre) y que han convertido este maravilloso lugar en el lugar idóneo para rodar una película fantástica
Impresionante y desconocido a partes iguales
No os recuerda a Gutzon Borglum y Korczak Ziolkowski con su monte Rushmore y su Caballo Loco respectivamente??
A mi me daria miedo pasearme por allí ;))
ResponderEliminarYo por la noche aquí no piso...
ResponderEliminarLa Srta Moneypenny me ha quitado las palabras...por la noche yo tampoco paso, pero...que chulo que es!!
ResponderEliminarLa alpaca dice:
La memoria es una artista extraña, redibuja los colores de la vida, borra lo mediocre y sólo conserva los trazos más hermosos, las curvas más conmovedoras.
Autor: Marc Levy
Mooogggaaaksrfff
Ese sitio de noche tiene que ser mortal... ¡Qué escalofrío!
ResponderEliminar¡Besitos!
milowcost●
Dejando de lado el tema mieditis lo cierto es que es de una cultura importante y el arte demostrado es el de un genio.
ResponderEliminarComo las caras de Buendía en Cuenca.
ResponderEliminarMe da yuyu...
ResponderEliminarMe encanta, sería como entrar en una peli de fantasía de esas en las que de repente los árboles tienen vida...
ResponderEliminarana♥
613materika