Normalmente cuando traigo un post de arquitectura imposible suele caracterizarse por la extraña forma de una casa o edificio, en este caso las peculiaridades son otras.
Para empezar fue la casa de Mark Twain (y por si eso fuera poco) además de ser el lugar donde escribió sus principales obras, según el autor «la casa tenía corazón, alma y ojos con los que vernos».
En el piso superior se hallaba el cuarto de billar y el estudio privado de Twain, donde escribiría tarde por las noches. Nadie tenía permitido entrar a la habitación. El cuarto también era empleado como salón para que los huéspedes varones disfrutasen un cigarro y licor. Twain había dicho: «Debería haber una habitación en esta casa donde se pueda maldecir, es peligroso tener que reprimir una emoción semejante» jeje, no me digais que no es una genialidad!.
La casa (ubicada en Hartford-Connecticut) fue diseñada por Edward Tuckerman Potter, un arquitecto de Nueva York. Mientras se la construía, el Daily Times de Hartford publicó que «la novedad presente en la arquitectura del edificio, la rareza de su disposición interna y la fama de su propietario conspirarán para convertirla en una casa de renombre durante un largo tiempo por venir». El coste total de la casa fue de 40.000 dólares, que fueron pagados de la herencia de la Sra. Clemens.
La casa fue edificada sobre 1,4 hectáreas de tierra y diseñada con siete dormitorios, siete baños, una estancia para el carruaje y un jardín de invierno que ocupaba toda una planta.
Actualmente es la casa-museo de Mark Twain y ha sufrido grandes reformas y ampliaciones, a quién no le gustaría tener un lugar como este??